Cuatro espectaculares goles de falta, a cargo de Cristiano Ronaldo, Leo Messi, Mario Balotelli y Milan Gajic, han servido para poner el colofón final a una primera fase de la 'Champions'.
No en vano, el balón utilizado este año en la Liga de Campeones es criticado por buena parte de los guardametas, al entender que produce extraños efectos.
En Marsella, el portugués Cristiano Ronaldo, del Real Madrid, sorprendía al meta Steve Mandanda, del Olympique local, con un disparo desde unos 35 metros que suponía el 0-1 para su equipo y su tercer gol de falta tras los anotados en Zurich en la primera jornada.
Desde la misma distancia, pero con más potencia, golpeó al balón el italiano Mario Balotelli, del Inter de Milán. Su lanzamiento llevó un efecto sorprendente y se convirtió en uno de los mejores de la competición, además de ser el 2-0 ante el Rubin Kazan, que sentenciaba el pase de su equipo a los octavos de final.
También con fuerza, pero con una gran colocación junto a la cepa del palo izquierdo, iba el lanzamiento de Gajic ante el Milán, que sirvió para que el Zurich se adelantara en el marcador.
Más colocación buscó el argentino Lionel Messi, del Barcelona, en Kiev. El reciente "Balón de Oro" con la zurda lanzó al ángulo superior de la escuadra izquierda de la meta defendida Olksandr Shovkovsky, poniendo el 1-2 definitivo en el marcador tras tocar en el travesaño, certificando el pase como primero de grupo del Barcelona.
Otro jugador de la albiceleste, Sergio "Kun" Agüero, del Atético de Madrid, también se ha destapado en la Liga de Campeones como un excelente tirador de faltas. A pesar de no ser el encargado habitual de llevar a cabo esta función en su equipo, el Chelsea pudo comprobar su maestría a balón parado.
Los equipos españoles también han tenido que sufrir en su carnes el peligro de los saques de libre directo desde la frontal. Así, el Sevilla vio como en Stuttgart un gran lanzamiento de Elson sorprendía a Javi Varas.
A la hora de analizar estos tantos se aprecia tanto una gran habilidad del lanzador para su correcta ejecución como algunos "despistes" de los porteros, que ellos achacan al balón usado en la competición, de la marca Adidas.
Uno de los primeros en dar la voz de alarma sobre lo "caprichoso" del balón fue Iker Casillas, guardameta del Real Madrid, que en los comienzos de la competición, y tras hablar con otros porteros como Buffon o Reina, lo definió como "un desastre total".
"Últimamente parece que todos los balones que fabrican perjudican más al portero. Se busca la esencia del fútbol, que es el gol. Es un balón complicado, no quiere decir que sea malo, no queremos llevarnos mal con la gente que los fabrica, pero sí crea problemas", dijo entonces Casillas.
Igual espíritu crítico mostró el guardameta del Zurich Johnny Leoni, tras encajar los dos tantos de falta de Cristiano Ronaldo en la primera jornada.
"El primero de sus goles fue culpa mía. El segundo fue culpa de la pelota. Varió su trayectoria dos o tres veces, y al final los puños se me quedaron por debajo del balón. Ahora los hacen para favorecer a los delanteros y al espectáculo. ¿Y los porteros? Yo no soy Casillas ni Pepe Reina, sólo el portero del Zurich, pero si me ponen un papel por delante firmaría para que los mejorara", lamentó Leoni.
Fallos como el que Víctor Valdés cometió frente al Dinamo de Kiev, el martes, podrían dar la razón a los guardametas, que se muestran impotentes ante el modelo creado para la actual competición.
De momento, la UEFA no se ha pronunciado sobre los deseos de los jugadores que deben colocarse bajo los palos. Por lo tanto, dura vida parece que les seguirá esperando a los guardametas en lo que resta de Liga de Campeones.
Fuente: EFE
1 comentarios:
Barca. Esto lo vamos ganar este Año.
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